De Oaxaca a Palestina, el mismo dolor nos hermana
Más de 500 años de conquista y colonización han pasado sobre estas tierras sureñas, desde que los gachupines de ayer y hoy iniciaron una guerra de exterminio contra los pueblos originarios. Desde la era de las encomiendas, los tributos, el despojo y el exterminio, en estás tierras sureñas, los colonizadores de ayer y hoy, han encontrado una férrea resistencia.
El día de hoy, nos solidarizamos, como magisterio democrático con la lucha del heroico pueblo palestino, que ha resistido desde hace más de 74 años, la guerra de exterminio del Estado nazi de Israel. Mientras esto ocurre, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se ha negado públicamente a romper relaciones con un estado fascista y genocida, a pesar de que la barbarie ha cobrado más de 30 mil vidas.
¿Qué tiene el presidente que decir, que no quiere romper con Netanyahu? Tendría que decir, que el ejército de Israel, grupos neofascistas como El Mossad, y otras empresas israelís, operan en nuestro país para espiar a luchadoras y luchadores sociales, crean programas de inteligencia para sembrar conflictos inter comunitarios y guerras fraticidas, entre hermanos. Las agencias de espionaje y contrainsurgencia de Israel, además de entrenar grupos paramilitares y al crimen organizado, también entrenan a la Guardia Nacional de la mal llamada “Cuarta Transformación” y a las policías mexicanas.
Por esta razón, desde La Marx México, y como parte del magisterio democrático de la Sección 22, nos solidarizamos con la causa palestina. Saludamos también el levantamiento del 7 de agosto que han emprendido los grupos rebeldes palestinos, desde Cisjordania hasta los Altos del Golan y desde Gaza hasta el sur del Líbano, en un levantamiento que se inscribe dentro de la Tercera Intifada. Esta intifada, se ha convertido en un levantamiento global, con fuertes movilizaciones en todo el mundo, poniendo en crisis al imperialismo norteamericano y a los gobiernos de los países árabes que se niegan a apoyar militarmente el levantamiento palestino, mientras miles de personas intentan cruzar las fronteras para unirse a la resistencia.
La resistencia que ofrece el pueblo palestino, es la misma resistencia que ofrecemos los pueblos indígenas de Oaxaca y el mundo, contra la colonización de la modernidad capitalista, que solo nos puede ofrecer hambre, sangre y destrucción tanto del medio ambiente, como de la vida misma. Por estas razones: *
¡De Oaxaca a Palestina, el mismo sudor y la misma sangre nos hermana!
¡Viva la tercera intifada!
¡Viva el levantamiento del pueblo palestino!
¡Vivan los pueblos originarios de México y el mundo!
¡Para ustedes, nuestro último suspiro!
Lorena Zayas es miembro de la CNTE, Sección 22, La Marx, México.